Hay veces que el destino te sonrie,
te da la mano y te compra un trago.
otras te escupe a la cara su experiencia,
te dedica noches largas y melancolicas.
te apuñala por la espalda y te da una patada al vacio.
hoy como primera noche en soledad,
pierdo mi ilusion,
pierdo la razon de mi identidad,
le doy un trago a mi botella de orgullo
y digiero nulas esperanzas a futuro.